La Trilogía del Miedo a Hablar en Público

Transforma la incomodidad de hablar en público en tu mayor fortaleza como líder.

La semana pasada estuve en México, dando 4 talleres a direct@s sobre Public Speaking. En todos hice una pregunta: ¿Qué es una cosa que quieren aprender hoy sobre hablar en público?

Las respuestas me inspiraron a escribir esta trilogía sobre el miedo a hablar en público. Un miedo que frena a mucha gente de compartir sus ideas, su conocimiento, sus valores y, por ende, limita la carrera de tantos profesionales.

¿Qué descubrí en México?

Manejo de nervios y seguridad: 27.5%

Claridad, concisión y articulación: 25%

Conexión e impacto en la audiencia: 25%

Otros temas: 22.5%

Seguramente que estos datos no te sorprenderán, como no me sorprendieron a mí ya que si bien por primera vez los medí en México, se repiten en todos los mercados.

El miedo y los nervios son habituales y en esta trilogía vamos a desarmarlos, intentando entender cómo se originan dentro tuyo, qué te detona esos sentimientos y superarlos.

Mi objetivo, tan ambicioso como posible, es que tus valores, tus ideas y tu voz, sean escuchados igual de alto y firme que la de quienes no sufren de miedo.

Porque el tema lo merece, en lugar de un artículo, he elegido escribir una trilogía, para hacerlo más profundo y más fácil de leer

La trilogía está compuesta de:

Parte 1:

•  La crítica: el monstruo que crece dentro nuestro
•  Quitemos la máscara al miedo

Parte 2:

•  La Competencia y el Perfeccionismo, en relación con la Comunicación
•  Disparadores del miedo
•  Al alto precio de no comunicar (cuantificación de pérdida de ganancias)

Parte 3:

•  ¿Qué es el poder, si no es influencia?
•  4 estrategias probadas para transformar el miedo en tu mejor ventaja competitiva
•  Tu próximo paso para POTENCIAR tu carrera

Trilogía del Miedo - Parte 1

La crítica: el monstruo que crece dentro nuestro

¿Te pasa que vas a una conferencia o estás de oyente en una presentación y empiezas mentalmente a criticar al ponente? Ocurre que a veces somos súper críticos -especialmente cuando de alguna manera sentimos/creemos que somos más competentes/sabemos más que esa persona que está hablando y sin embargo él o ella están en el escenario y nosotros de oyentes.

🤕❤️‍🩹Frustración habitual de quienes no nos sentimos reconocidos.

Si te preguntas por qué lo sé, es porque me ha pasado muchas veces. Hasta que me di cuenta que mi crítica a los demás era un monstruo que en lugar de empujarme a superar mis "dolores", se transformaba en miedo a hablar en público. Supongo que me imaginaba a toda la audiencia criticándome a mí de la misma manera que lo hacía yo.

Para mitigar mi pánico, y como la vida me había enseñado que no podía ser vulnerable, transformaba al monstruo del miedo en petulancia. Me lanzaba al escenario con presentaciones con buena calidad de contenido, de datos y slides creativos, pero más largas de lo debido, muy serias y -reflexionando con el diario del lunes - me imagino que tremendamente aburridas para mi audiencia.

Lo peor, es que siempre había gente que me quería y que me decía que lo había hecho muy bien. Y, petulante moi, se lo quería creer porque de verdad que había trabajado mucho en que fuera la presentación perfecta (ya hablaremos del perfeccionismo).

Hablar en público es, a menudo, citado como uno de los mayores temores profesionales. Cuando estás en una posición de media o alta responsabilidad —ejecutivos, emprendedores y líderes—este miedo puede sentirse particularmente agudo. Creo que cuanto mayor es la responsabilidad que vamos asumiendo, el miedo a hacerlo mal aumenta, hasta el punto que parece haber una correlación entre el miedo escénico y el aumento de la responsabilidad.

¿Será que nuestra parte insegura tiende a pensar que la audiencia es igual de criticona que nosotros?

Por suerte, no es así.

Mis años de Tony Robbins me ayudaron a descubrir, ponerle cara, cuestionar y superar mis miedos. Luego, años de dar conferencias a lo largo y ancho del planeta, me demostraron que el público TAMBIÉN TIENE MIEDO, pero en este caso su miedo es que el ponente sea "malo", no merezca su tiempo y se tenga que levantar e irse de un auditorio.

Primera buena noticia: por su miedo, velan por nuestro triunfo😁

Segunda mejor noticia: a una conferencia la gente va a escuchar y a aprender, no a criticar.

Quitando la Máscara al Miedo

Hablar en público es un acto vulnerable. Te expone al juicio, la crítica y, lo peor de todo, a la posibilidad de fracasar. Para aquellos que están constantemente bajo los reflectores—ya sea liderando equipos, presentando propuestas a inversionistas, o representando a tu organización—este miedo puede ser aún más pronunciado. Después de todo, tu reputación está en juego.

De hecho, cuando la gente nos ve a los ponentes, creen que nos subimos a un escenario felices y relajadísimos. Mi realidad es que siempre, antes de subir a un escenario estoy tan feliz como nerviosa, y pienso que si algún día una audiencia no me supone un desafío, es porque le perdí el respeto a la inmensa oportunidad que tengo de compartir mis ideas, conocimiento y valores con el mundo.

Pero, ¿cómo podemos realmente comenzar a desenmascarar este miedo? El primer paso es mirarnos a nosotros mismos con honestidad y curiosidad. Permíteme compartir algunas reflexiones y preguntas que pueden ayudarte en este proceso:

1.  El juego de las apariencias: ¿Alguna vez te has encontrado alardeando de tus habilidades fuera del escenario? Es como esos esquiadores novatos que llegan a la pista con el equipo más caro y la ropa más elegante, solo para demostrar que son los menos hábiles en la nieve. Si te identificas con esto, pregúntate: ¿Por qué sientes la necesidad de aparentar más? ¿De dónde viene ese impulso?
2.  El miedo oculto: Ese miedo a ser "menos" o esa presión por ser "mejor", ¿qué beneficio crees que te trae? ¿Es posible que te esté limitando más que ayudarte?
3.  La voz en tu cabeza: Cuando piensas en hablar en público, ¿qué te dice esa voz interna? ¿Son pensamientos realistas o estás asumiendo lo peor sin evidencia?
4.  El origen de tus miedos: Piensa en tus experiencias pasadas. ¿Puedes identificar momentos específicos que hayan contribuido a tu miedo actual? ¿Cómo han influido esas experiencias en tu percepción de hablar en público?
5.  El público imaginario: ¿Cómo imaginas a tu audiencia? ¿Los ves como jueces implacables o como personas que genuinamente quieren escuchar lo que tienes que decir? ¿Es posible que estés proyectando tu propia autocrítica en ellos?

Entender y reconocer nuestro miedo es el primer paso para transformarlo. No se trata de seguir una receta, sino de iniciar un diálogo honesto con nosotros mismos. En las próximas partes de esta serie, profundizaremos en cómo este miedo se relaciona con la competencia y el perfeccionismo, identificaremos sus disparadores, y exploraremos formas de convertirlo en nuestra ventaja competitiva.

Reflexiones para el camino

Mientras nos preparamos para profundizar más en este tema, te invito a reflexionar sobre las siguientes preguntas:

1. ¿Cómo ha impactado el miedo a hablar en público en tu carrera o en tu vida personal?
2. ¿Qué significaría para ti poder transformar este miedo en una ventaja competitiva?

En nuestro próximo artículo, exploraremos la relación entre la competencia, el perfeccionismo y la comunicación, y cómo estos factores pueden amplificar nuestro miedo a hablar en público. Además, analizaremos el alto precio que pagamos cuando evitamos comunicarnos efectivamente.

No olvidemos que el miedo a hablar en público es común, incluso entre oradores experimentados. La clave está en reconocerlo, entenderlo y, como veremos en las próximas entregas, aprender a trabajar con él, no contra él.